El próximo 28 de mayo doce comunidades autónomas y más de 8.000 municipios van a ser renovados. Coincidiendo con esta convocatoria electoral, previa a las elecciones generales de diciembre de este año llega a las librerías “¿Y si me presento a las elecciones?” (Ed. Deusto) el tercer libro del comunicador y profesor de la UAO CEU, Juan López alegre.
Más de 500.000 personas forman parte de las listas electorales el próximo 28 de mayo …
La política está muy mal valorada, Sociométrica dice que la opinión pública la valora con 1,2 sobre 10 pero 1 millón de personas ceden su nombra cada cuatro años para ir en una lista, a una de las 23.000 mesas, etc.… es una contradicción el alto nivel de participación política y la baja valoración de la misma.
A pesar de la vida estresante que llevan, un estudio de la Universidad de Oxford que analizó a políticos en varios países dice que los políticos viven más que el resto de la población.
¿Cuánta gente trabaja en política en España?
Elisa de la Nuez dice que la industria de la política emplea a 300.000 personas en España sin cargo electo frente a los 79.000 cargos electos, menos del 20%. Nadie vota al presidente de Paradores, de AENA, de la Guardia Civil o de Loterías que gestionan presupuestos y mueven dinero en cantidades muy por encima de la mayoría de políticos electos.
La sensación es que los políticos se pelean entre ellos por un lugar en las listas electorales.
En España la industria política tiene 20.000 puestos por cubrir con lo cual la demanda es más baja que la oferta, lo que repercute en la calidad de las personas que ejercen puestos de alta responsabilidad.
¿Hay cargos más atractivos que otros?
Sin duda, la política local, en especial la que se ejerce en pequeños municipios, es la cenicienta de la política española porque hay pocos recursos y no se percibe remuneración alguna. En 2019 en 587 municipios, un 7,2% del total, no se presentó ni una sola lista electoral.
¿Los ciudadanos somos exigentes con los políticos?
Según la agencia valenciana antifraude sólo el 2,3% de los españoles está preocupado por la corrupción, a pesar de los cual un estudio de la Universidad de Las Palmas afirma que el 92% de los municipios de más de 100.000 habitantes se han visto envueltos en un caso de corrupción.
Aunque parece que la población valore mucho la austeridad en la gestión eso no es así. A más fiestas, más votos: un estudio de la Universitat Oberta de Catalunya y la Universidad Politécnica de Cataluña realizado en 2.104 municipios reveló que doblar el gasto en fiestas da hasta 2.5 puntos más en votos y reducir dicha tasa hasta la mitad puede llegar a restar hasta 1,2 puntos en los votos obtenidos en las urnas.
Mucha gente cree que ser político implica recibir un gran salario.
No es cierto, el 90% de los alcaldes de España no cobra ni un céntimo y merecen reconocimiento por parte de la sociedad. Hay que tener en cuenta que 1.359 municipios, un 16% de los 8.112 pueblos de España tienen menos de 100 habitantes y en estos municipios no hay salarios y ni tan siquiera funcionarios para realizar trabajo alguno y mucho menos ingresos municipales vía impuestos para realizar inversión alguna. En otros casi 5.000 pueblos viven menos de 1.000 vecinos, son el 61% de los ayuntamientos españoles, y son municipios de muy difícil gestión por la limitación de recursos, el envejecimiento de la población y la demanda creciente de servicios.
En España hay 67.000 concejales, 2.000 diputados autonómicos, 350 diputados nacionales, 54 eurodiputados, 8.112 alcaldes, 265 senadores y 1.000 diputados provinciales, aunque son muchos la sangría viene de los cargos de libre designación, altos cargos de la administración y asesores. Por ejemplo, en Moncloa trabajan 2.500 personas por 1.800 en el ala oeste de la Casa Blanca en Washington.
¿Los políticos trabajan mucho?
Ser muy productivo en normas de toda índole no supone obligatoriamente un bien para la sociedad. En 2021 los diarios oficiales publicaron 846.000 páginas de normas, lo que hace muy difícil la gestión empresarial y obliga a las empresas a gastar mucho dinero y tiempo en asesoría y gestiones de todo tipo. Somos un país sobre regulado.
En España se publican cada día 662 páginas de leyes, decretos, reglamentos y otras normas; esta catarata de normas de todo tipo obliga a las empresas a perder mucho tiempo adaptando sus estructuras y gestión a tanto chapapote normativo.
Muchas veces se cree que lo mejor sería que el gobierno estuviera en manos de ejecutivos de éxito.
Ser el mejor empresario no te convierte en el mejor político: Florentino Pérez o Antonio Garrigues no llegaron ni a ser elegidos cuando se presentaron a las elecciones y con ello, España se perdió a personas brillantes para dirigir su administración y sus empresas ganaron grandes directivos que han tenido una trayectoria brillante y han dado mucho a la sociedad, pero desde el sector privado. En su contrario no son excepción los casos en los que ¡un buen político tiene madera de empresario, un buen ejemplo de ellos es Josu Jon Imaz (Repsol)