La búsqueda de la justicia social en la globalización
Juan Comas
La Organización Internacional del Trabajo (OIT) está consagrada a la promoción de oportunidades de trabajo decente y productivo para mujeres y hombres, en condiciones de libertad, igualdad, seguridad y dignidad humana. Sus objetivos principales son promover los derechos laborales, fomentar oportunidades de empleo dignas, mejorar la protección social y fortalecer el diálogo al abordar temas relacionados con el trabajo.” Al promover la justicia social y los derechos humanos y laborales reconocidos a nivel internacional, la Organización persiste en su misión fundadora: la paz laboral es esencial para la prosperidad”, según dice Juan Felipe Hunt, director de la Oficina de la OIT en España.
¿Por qué el objetivo central de la OIT es el “Trabajo decente para todos”?
Porque la pobreza todavía está arraigada y se extiende a lo largo del mundo en desarrollo y en algunos países en transición. Se estima que en la actualidad cerca de dos mil millones de personas en el mundo viven con el equivalente de menos de dos dólares al día. La OIT considera que la vía principal para salir de la pobreza es el trabajo y de hecho, el tema de la globalización es una de nuestras grandes preocupaciones, pues de ahí puede venir, en buena medida, la salida de la pobreza de muchos de estos países, pero ha de ser justa y equitativa. Esa es nuestra propuesta, que debe existir un equilibrio entre el desarrollo económico y el desarrollo social. Nuestro principal reto es que exista el pleno empleo y el trabajo decente para todos. De hecho, dentro de los Objetivos del Milenio (ODM), así lo hemos reflejado y estamos haciendo todos los esfuerzos para ello.