Con esta premisa, tocaba ya abrir horizontes, y pensar en nuestra apertura a otros mercados, que nos permitan alcanzar los volúmenes de negocio que ese plan de expansión que tratamos de implantar requiere. Con ello, y con una profunda tendencia a la internacionalización por parte del sector, que por el momento nosotros decidimos aparcar, entendemos que es el momento de situar a GEVORA en Madrid, como centro de operaciones con vista a poder poner nuestras capacidades a disposición de las distintas Administraciones centrales, autonómicas y locales, con carácter estatal.