Este municipio, en el que habitan casi 65.000 habitantes, está situado a unos 15 kilómetros de Madrid. Cuenta con un entorno de más de 2.000 hectáreas de bosque de encinas y un casco histórico en el que se encuentran, entre otros el Convento de la Encarnación y el Palacio del Infante Don Luis, rehabilitado recientemente y en el que se celebran importantes eventos. Su alcalde presidente nos explica en esta entrevista cuáles son sus prioridades para esta ciudad en su nuevo mandato.
Desde 2011 está vinculado al Ayuntamiento de Boadilla del Monte y este es su segundo mandato como alcalde presidente. ¿Cuáles van a ser los grandes ejes de actuación de su equipo para esta legislatura y, sobre todo, sus prioridades?
Nuestra prioridad más absoluta es mejorar la movilidad, el transporte y las conexiones con Madrid. Es la mayor preocupación de nuestros vecinos y, por tanto, la nuestra. Durante esta legislatura se darán importantes pasos para mejorar en este sentido por nuestra parte, pero es fundamental que el Gobierno de España apueste ya de una vez por todas por nuestra ciudad, en la que desde hace décadas no invierte ni un euro. Necesitamos que el Cercanías pase por Boadilla y que se acometan mejoras en la M-50, que es la carretera con más vocación de servicio para nuestros vecinos.
Boadilla del Monte se encuentra entre los municipios con mayor nivel en calidad de vida, renta per cápita, etc. de España. ¿Cuál es el motivo?
Yo creo que no hay uno solo, sino varios. La localización de Boadilla nos sitúa en la corona metropolitana de Madrid, y eso es una ventaja. El 56% de la población mundial vive en ciudades, y para 2050 se estima que 7 de cada 10 personas lo hagan. Estar cerca de una capital europea como es la capital de España nos brinda oportunidades que no tienen otros municipios.
Por otra parte, no sólo es que estemos a escasos 15 kilómetros de distancia de Madrid, sino que contamos con un maravilloso entorno de más de 2.000 hectáreas de bosque de encinas y un rico patrimonio histórico que nos hacen muy atractivos.
A eso hay que añadirle un urbanismo ordenado y moderno, con una baja densidad de población, que ha hecho que resaltemos todas esas características verdes que nos hacen diferentes.
Por supuesto, todo esto no serviría de nada si no fuéramos una de las ciudades más seguras de España y con mejores servicios de nuestro país.
Destacan la limpieza viaria y el alumbrado público, con un urbanismo sostenible. ¿Qué nos puede decir de estos temas?
Para nosotros la limpieza es fundamental. Es, junto a la seguridad, la base para que una ciudad sea respetada y respetable. Amada y amable. Querida y acogedora. Por eso, y aunque el nivel es alto, en breve licitaremos un nuevo concurso de recogida de basura y limpieza viaria que aumente la inversión en esta materia para seguir mejorando en esta área.
Sobre el alumbrado público, también somos muy sensibles, porque es el ingrediente fundamental para que una ciudad sea segura. Sea vivida. Y sea funcional. Por eso, en menos de dos años, tendremos una ciudad con un alumbrado público LED completamente, algo de lo que muy pocas ciudades del mundo pueden presumir. Esto no sólo mejorará el alumbrado de toda la localidad, sino que generará ahorros millonarios en las arcas públicas a lo largo de los años.
Sobre el tráfico y la movilidad, ¿cómo piensan mejorar las conexiones entre Boadilla del Monte y Madrid? ¿Cuáles están siendo sus prioridades?
Ahora mismo estamos construyendo un carril directo de acceso a la M-50 dirección Alcorcón desde la avenida de Infante Don Luis y la M-513, y esto hará que se ponga fin a uno de los grandes problemas de los vecinos de la localidad.
En paralelo, estamos trabajando en un proyecto para soterrar parcialmente la glorieta que une el sector B con Olivar de Mirabal, concretamente las avenidas Condesa de Chinchón y Monte Segovia, y duplicar la M-513. El proyecto incluirá la duplicación de la M-513 en todo el tramo afectado por la actuación. El soterramiento de la duplicación en el entorno de la avenida Condesa de Chinchón y glorieta de la avenida Monte Segovia. La construcción de una nueva glorieta en la prolongación de la avenida Condesa de Chinchón. La adecuación urbanística del entorno, con el fin de hacer más permeable la zona y facilitar la comunicación entre sectores. Y conexiones directas y fluidas con la M-513 y la M-50.
Si conseguimos esto, que vamos a abordar con fondos propios, y que vamos a conseguir, tarde o temprano, nuestra ciudad va a dar un salto de calidad impresionante.