“Trabajamos para liderar el futuro de la movilidad y la mejora funcional”
Miguel A. Gallego
Orliman proviene de una empresa familiar que empezó fabricando pequeños productos de ortopedia, hasta que en el año 1992 nace la visión más industrial construyéndose un taller para fabricar en serie. Enric Florensa Ortiz, consejero delegado de la compañía, explica los principales hitos de la compañía: “En 1996 nos trasladamos y damos el salto definitivo como industria de dimensión a la vez que empezamos a exportar. A partir del año 2002 creamos el I+D como departamento con entidad propia y se potencia con profesionales y acceso a nuevas tecnologías en la industria, como la soldadura de alta frecuencia. En el año 2009 inauguramos la actual fábrica con una superficie de 10.000 metros cuadrados y sistemas de almacén robotizado. Como ultimo hito destacaría la compra de la tercera empresa del sector en Francia, lo que nos consolida definitivamente como empresa internacionalizada”.
¿Cuál es la misión de Orliman?
Nos situamos en el mercado de la Ortopedia no invasiva. Diseñamos y producimos Ortesis y Prótesis. Y en este entorno, trabajamos para liderar el futuro de la recuperación de la movilidad y la mejora funcional. Es decir, ante problemas de movilidad crónicos, traumáticos o neurológicos, o simplemente por prevención, crear las mejores soluciones trabajando en equipo con clientes, proveedores y médicos.
La gran mayoría de sus productos tienen la certificación “Oeko-tex standard 100”. Háblenos de su catálogo de productos, de los más demandados y de la importancia de la certificación para el consumidor.
Algunas certificaciones como Oeko-tex, FDA o las imprescindibles ISO, son conocidas y apreciadas por el consumidor. Otras como Asqual, GKV… son necesarias para exportar a determinados países. Todas estas certificaciones requieren inspecciones periódicas en las plantas y por sus exigencias pensamos que dan prestigio a nuestros productos, especialmente en el ámbito internacional.
Respecto a nuestro amplio catálogo, lo que aprecian consumidores, ortopedas y médicos es la calidad, confort, y, por supuesto, la efectividad biomecánica. Históricamente despuntamos por la renovación estética y de materiales de nuestra gama Thermo-Med. Por volumen de ventas e innovación destacaría las gamas de muñequeras Manutec-Fix y fajas lumbares Evotec, donde usamos soldadura de alta frecuencia. Esto nos permite acabados más confortables y de más duración. En el apartado de rodilleras destacaríamos la gama 3-TEX, donde hemos desarrollado tejidos multicapa que permiten combinar compresión, adaptabilidad y transpiración. Por su ingeniosidad y simplicidad destacaría productos como el Boxia que mejora sustancialmente la movilidad de personas con problemas neurológicos.
Por último, hablaríamos de un nuevo ángulo de trabajo en el sector con gamas como Orliman-Sport y Orliman-Pediatrics, que van destinadas a clusters de consumidores con necesidades específicas, en vez del esquema tradicional de patología/solución.
Ustedes lideran el mercado nacional de ortopedia no invasiva. ¿Qué hace especialmente potente a la empresa dentro de esta industria?
Nuestra fuerza proviene de los orígenes y se refuerza con el crecimiento de la empresa. Nacemos como empresa siendo una pura ortopedia, conociendo muy bien el oficio y adquiriendo la capacidad de industrializar procesos históricamente artesanales del taller de ortopedia. Tenemos un I+D de raíces muy cercanas al paciente y al ortopeda. Trabajamos en equipo con los ortopedas que conocen muy de cerca las necesidades de los pacientes y los detalles que hacen la diferencia. A esta base le añadimos, con el paso del tiempo, la obsesión por la calidad y el servicio. Y tras la adquisición de uno de los líderes del mercado francés añadimos a nuestro bagaje, know-how potente de Category Management y la riqueza de ser mucho más internacionales.