En Pelayo siempre ha habido gran sensibilidad por la acción social y desde sus inicios la compañía ha desarrollado muchos proyectos dentro de este campo. En 2005 se decidió aglutinar y canalizar bajo el paraguas de la Fundación todas las iniciativas con fines solidarios y humanitarios que se venían desarrollando hasta el momento, incorporando nuevas acciones conforme se iba definiendo y consolidando en el tiempo la labor llevada a cabo.
¿Hasta qué punto tuvo importancia el empuje del presidente de la compañía, José Boada, en la puesta en marcha de la Fundación?