Joan Orrit Clotet, director gerente de Benito Menni CASM Hermanas Hospitalarias
En el mundo actual, complejo y rápidamente cambiante, nuestro papel como directivos se despliega mucho más allá de las fronteras de los ámbitos de actuación tradicionales. Por nuestra especial responsabilidad, estamos llamados a desplegar un rol fundamental para el desarrollo tanto de nuestras organizaciones como del entorno en el que se integra nuestro ecosistema empresarial. Fomentando prácticas éticas mediante el ejemplo y promoviendo la innovación y la interacción con la comunidad y los diferentes grupos de interés, podemos impulsar cambios significativos en aras al interés común. En estas líneas propongo unas breves reflexiones sobre cómo nuestras potencialidades como directivos pueden contribuir efectivamente a la construcción de una mejor sociedad.
En primer lugar, mediante el liderazgo y el despliegue de la visión organizativa, comunicando un propósito claro y motivando a los colaboradores a trabajar para alcanzar objetivos comunes que van mucho más allá de los objetivos operativos, articulando una visión que inspire a las personas a realizar una contribución positiva a la comunidad; esta comunión en torno a un propósito no sólo mejora la productividad, sino que también fomenta un sentido de pertenencia y compromiso entre los miembros del equipo, mediante una visión trascendente que proyecta la razón de ser de la empresa mucho más allá del corto plazo. Es de sobra conocido el hecho de que las empresas con un fuerte compromiso con la sostenibilidad a menudo objetivan cómo sus empleados apoyan iniciativas que benefician al medio ambiente y a la comunidad.
Ello se vincula claramente con la responsabilidad social de la empresa (RSE), favoreciendo la implicación de las organizaciones e impulsando iniciativas que mejoren la vida de la colectividad, contribuyendo de este modo a cerrar la brecha entre las empresas y su ámbito de referencia. En este sentido, un directivo que defiende el alcance social no sólo mejora la reputación de su organización, sino que también fomenta la buena voluntad y la colaboración dentro de su entorno. Este compromiso puede conducir a mejores condiciones sociales y a un sentido de comunidad más fuerte. Como bien sabemos, las iniciativas de RSE pueden adoptar muchas formas, desde programas de sostenibilidad ambiental, contribuciones económicas y en especie, voluntariado, cesión de espacios, etc. Por ejemplo, en nuestro caso, somos una institución especializada en la atención a la salud mental, y estamos presentes en distintos ámbitos de cooperación locales, en orden a identificar necesidades emergentes y contribuir a una vida mejor para la ciudadanía.
"Es de sobra conocido el hecho de que las empresas con un fuerte compromiso con la sostenibilidad a menudo objetivan cómo sus empleados apoyan iniciativas que benefician al medio ambiente y a la comunidad"
Asimismo, otro elemento de crucial relevancia es el papel fundamental de la ética en las decisiones empresariales, que en muchos casos impactan de manera significativa tanto a la empresa como a su entorno. Priorizando las consideraciones éticas, podemos establecer un claro estándar de comportamiento y una referencia dentro de nuestros equipos que irradia al conjunto de la organización. Un directivo que se niega a tomar atajos para obtener ganancias no sólo protege la integridad de su organización, sino que también contribuye a una cultura de confianza y respeto en la comunidad empresarial; por todo ello, mediante la transparencia, la equidad y la rendición de cuentas, promovemos una sociedad más justa. En este sentido, se puede afirmar que el directivo o bien será ético o no será.
Vinculado con todo lo anterior, y con la dimensión ética de la praxis empresarial, es posible fomentar en gran manera el desarrollo de la diversidad y la inclusión, elemento esencial para fomentar la creatividad y la innovación dentro de las organizaciones, creando un ambiente donde se valoran y escuchan diversas perspectivas. Esta inclusión, no sólo mejora la dinámica del equipo, sino que también conduce a una mejor toma de decisiones y resolución de problemas. Una fuerza laboral diversa puede comprender y abordar mejor las necesidades de una base de clientes variada, beneficiando en última instancia a la sociedad en su conjunto. Además, cuando las organizaciones adoptan la diversidad, contribuyen a derribar las barreras sociales y a promover la igualdad.
"Es muy importante que los directivos tomemos conciencia de que ocupamos una posición de gran potencialidad en la construcción de una sociedad mejor"
Finalmente, quisiera expresar el relevante rol del directivo como referente, mentor y facilitador del desarrollo de sus colaboradores, generando un entorno de crecimiento personal y profesional que permita desplegar todas las potencialidades de talento, aspecto crucial para la sostenibilidad de la organización y de sus valores; favoreciendo un ambiente en el que las personas puedan prosperar y vincularse con mayor fuerza a la institución, es posible crear un mayor sentido de pertenencia y de visión trascendente, beneficiando tanto a la organización como a su entorno; es bien conocido que, cuando las personas se sienten valoradas y apoyadas, es más probable que participen en iniciativas comunitarias, amplificando de este modo el impacto positivo en la sociedad.
En conclusión, es muy importante que los directivos tomemos conciencia de que ocupamos una posición de gran potencialidad en la construcción de una sociedad mejor y que ello trasciende las fronteras de nuestro ámbito estrictamente operativo, manifestándose a través de un liderazgo trascendente y de propósito, mediante la toma de decisiones en base a criterios éticos, el compromiso con el desarrollo de sus equipos, la participación comunitaria y la promoción de la diversidad y la inclusión. Al reconocer y aceptar nuestra influencia, podemos impulsar cambios significativos dentro y fuera de nuestras organizaciones. A medida que afrontamos los desafíos globales del mundo moderno, el papel de una gestión holística será crucial para construir una sociedad más justa, equitativa y sostenible para todos.