Las recientes elecciones al Parlamento Europeo han generado un impacto significativo en los mercados europeos. El auge de la extrema derecha ha provocado una conmoción en los países fundadores de la Unión Europea (UE), como Francia y Alemania. En Francia, el crecimiento del partido de Marine Le Pen ha llevado al presidente Emmanuel Macron a disolver la Asamblea Nacional y convocar elecciones anticipadas. En Alemania, Olaf Scholz se encuentra cada vez más debilitado, enfrentando una creciente presión política.

Este cambio político ha influido negativamente en la renta variable europea, que ha sufrido una caída debido a la incertidumbre generada por los resultados electorales. Richard Brown, gestor de carteras de cliente en Janus Henderson, comenta que "este resultado ha empañado una tendencia positiva que se había observado hasta ahora en 2024". Según Brown, el aumento de los partidos de extrema derecha ha añadido dramatismo al panorama político europeo, afectando el sentimiento del mercado más que produciendo un cambio fundamental en la narrativa.

A pesar de que los mercados europeos han cerrado con pérdidas y el euro se ha depreciado frente al dólar, Brown destaca que una moneda comunitaria más débil podría complicar los recortes de tipos por parte del Banco Central Europeo. "Será interesante ver cómo cambian las expectativas de tipos", añade.

La moneda más débil podría beneficiar a los exportadores europeos y a las empresas de pequeña capitalización, mientras que la naturaleza cambiante de la política europea también es un factor a considerar. Brown apunta que "la derecha ha ganado elecciones en Europa anteriormente, pero rara vez ha provocado un cambio drástico en la política".

El impacto de los resultados electorales se ha ajustado razonablemente a los datos de las encuestas previas, sugiriendo que los riesgos ya estaban parcialmente descontados. Sin embargo, desde Janus Henderson advierten que estos resultados podrían representar un golpe de sentimiento para la región, recordando a los inversores los riesgos políticos que habían sido relegados a un segundo plano durante el año pasado.

Uno de los mayores perjudicados por el auge de la extrema derecha ha sido el presidente francés Emmanuel Macron. La contundente victoria del partido de Marine Le Pen, Rassemblement National, con un 32% de los votos frente al 15% obtenido por la alianza centrista de Macron, ha llevado al mandatario a tomar la drástica decisión de convocar elecciones anticipadas.

"La noticia más importante fue el resultado en Francia, donde el presidente Macron convocó elecciones anticipadas después de que la Agrupación Nacional, liderada por Marine Le Pen y Jordan Bardella, obtuviera más del doble de votos que la coalición centrista de Macron", subraya Brown.

Este evento ha tenido un impacto significativo en los activos de riesgo franceses, especialmente en las acciones de orientación nacional, que podrían verse afectadas durante las próximas semanas dependiendo del resultado de las elecciones. Aunque el cambio más drástico se produjo en Francia, refleja un aumento del apoyo a los partidos nacionalistas y proteccionistas en toda Europa.

Desde Janus Henderson identifican varias consecuencias de estos resultados. El impacto en Francia es un revés para la integración transfronteriza de la UE, una política defendida por Macron. Este cambio podría ser negativo para los bancos, ya que las expectativas de una actividad paneuropea de fusiones y adquisiciones en el sector bancario se verán atenuadas. Además, se considera un revés para la capacidad de Europa de desarrollar una política industrial a escala continental que compita con las estrategias de autosuficiencia de Estados Unidos y China.

En resumen, aunque los resultados de las elecciones representan un revés para la región, Janus Henderson concluye que no suponen un cambio importante en la narrativa general. La sólida valoración de los mercados europeos frente a Estados Unidos y la naturaleza global de las empresas domiciliadas en Europa mantienen la perspectiva positiva a largo plazo.

En conclusión, los resultados de las elecciones al Parlamento Europeo han tenido un impacto considerable en los mercados europeos, introduciendo nuevas dinámicas políticas y económicas que los inversores deben seguir de cerca. Aunque la reacción inicial ha sido negativa, la naturaleza a largo plazo de las inversiones en Europa y el contexto global de recuperación económica ofrecen un panorama de oportunidades y desafíos que deben ser evaluados con atención.