Fernando Ramos
El Club de Exportadores e Inversores Españoles, fundado en el año 1997, es la principal organización en España centrada exclusivamente en la internacionalización empresarial. Multisectorial, independiente y sin ánimo de lucro, está formada por empresas de diversos tamaños, pertenecientes a prácticamente todos los sectores productivos. Es un reconocido interlocutor ante la Administración española, instituciones públicas y privadas, organismos internacionales y medios de comunicación.
Como presidente del Club de Exportadores e Inversores, ¿qué valoración hace de la evolución de la internacionalización de las empresas españolas en los últimos años y cuáles considera que han sido los principales desafíos que han enfrentado?
Las empresas españolas han incrementado sustancialmente su presencia en mercados internacionales. La exportación de bienes y servicios ha pasado de representar el 28% del PIB en el año 2008 al 39% en 2023. Sin embargo, tras la pandemia hemos perdido cuota de mercado mundial en bienes, aunque ha aumentado en servicios, especialmente no turísticos.
Respecto a los desafíos actuales, destacaría la incertidumbre económica global como consecuencia del aumento del proteccionismo, la rivalidad USA-China, la guerra de Ucrania, entre otros factores. Pero además tenemos desafíos internos dentro de España que disminuyen nuestra competitividad internacional provocados por el aumento de la regulación, la burocracia, mayor presión fiscal y subidas de costes.
¿Cuáles cree que son las prioridades actuales del Club para mejorar la competitividad de las empresas españolas en los mercados internacionales?
Las prioridades del Club pivotan sobre varios ejes clave, comenzando por la diversificación geográfica. Europa absorbe el 72% de las exportaciones españolas y desde el Club fomentamos la entrada en mercados de rápido crecimiento como África, India o el Sudeste Asiático. A pesar de tener más de dos millones de empresas, España cuenta con apenas 54.000 exportadores regulares. Es cierto que es una cifra que ha aumentado un 55% en una década, pero que sigue siendo insuficiente. Por eso, desde el Club, proponemos ampliar los programas que se dirigen a aumentar esta cifra y fortalecer los instrumentos de ICEX. Es importante resaltar que, actualmente, el 66% de las exportaciones de nuestro país se concentran en apenas 1.000 empresas y eso es así desde hace 25 años, lo que es un riesgo para nuestro país. Desde el Club impulsamos reformas que permitan un entorno regulatorio y fiscal más favorable para las pymes, facilitando su crecimiento y su acceso a mercados internacionales. La transformación digital es otro de los ejes esenciales para poder mejorar la competitividad, por lo que es importante fortalecer políticas que incentiven la inversión en I+D+i, y que las empresas españolas adopten nuevas tecnologías que faciliten su internacionalización.
En su experiencia, ¿cómo ha evolucionado la percepción de la imagen de las empresas españolas en el exterior y qué aspectos cree que aún se pueden mejorar?
La percepción de la imagen de las empresas españolas en el exterior ha mejorado significativamente en las últimas décadas, pues han logrado posicionarse como referentes globales en sectores clave como infraestructuras, energías renovables, tecnología y telecomunicaciones. Sin embargo, hay algunos aspectos que pueden seguir mejorándose, como la innovación tecnológica, un mayor protagonismo de las pymes para que puedan experimentar el recorrido de la internacionalización que ya han vivido las grandes empresas, o un mayor enfoque en la sostenibilidad mediante políticas ambientales más ambiciosas.
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